18 de septiembre
El espíritu humano está dotado de la capacidad de transformar, incluso, las circunstancias más difíciles, de crear valor con un sentido más rico y profundo. Cuando cada persona haga florecer esta capacidad espiritual sin límite, y cuando los ciudadanos anónimos se unan con el compromiso de generar cambios positivos, sin falta surgirá una cultura de paz, lo que dará paso al siglo de la vida.
—Daisaku Ikeda