SANTO DOMINGO, RD. – La empresa Seaboard (Transcontinental Capital Corporativo LTD) recoge al mes un aproximado de 900 kilos de basura y desechos sólidos en la ribera del Río Ozama, evitando que un estimado de 70 toneladas de plásticos lleguen al Mar Caribe.
El vicepresidente y gerente general de Seaboard, Armando Rodríguez, dijo que esta empresa está comprometida con la limpieza del Río Ozama por razones ambientales y también para que las operaciones de las plantas no se vean afectadas por los desechos sólidos, destacando que se observa que alrededor de las generadoras está totalmente limpio.
“Esa es una constante de los técnicos y directivos de estas plantas, que siempre están pendiente de recoger la basura y los plásticos que llegan a esta zona, para lograr detener la gran cantidad de desechos sólidos se implementó un recolector de basura que detiene los plásticos y una empresa la recoge y la recicla”, explicó Armando Rodríguez.
Mientras que la encargada del Departamento de Medio Ambiente de la empresa Seaboard, ingeniera Shiara Ruiz, especificó al conversar con el director de Comunicaciones de la empresa, Miguel Nova, que aunque se tiene un estimado de la recogida de 900 kilos de basura, la cantidad depende de varias temporadas al año, ya que cuando hay muchas actividades las personas tienen a tirar más desechos sólidos y plásticos.
“Ahí es donde entra la empresa energética Seaboard a sanear y a recoger la basura en la cañada que desemboca en la periferia del Río Ozama, exactamente en el lugar donde está ubicada las plantas Estrella del Mar II y Estrella del Mar III, colocándose un recolector con mallas que detiene los plásticos y las fundas, y solo baja el agua de las lluvias, entregándose esos desechos a una empresa que se encarga de recoger en camiones para su reciclaje.”, así lo detalló la ingeniera Shiara Ruiz.
Destacó que, durante los 32 años de operación en la ribera del Río Ozama, Seaboard ha mantenido de forma permanente varias iniciativas de saneamiento y recolección de la basura del entorno, evitando así que cientos de toneladas dañen el río Ozama y lleguen al Mar Caribe.