Por Augusto Álvarez
El nuevo líder de la Iglesia Católica, Robert Prevost, quien ha tomado el nombre de Papa León XIV, es un estadounidense que se naturalizó ciudadano peruano, según reveló el gobierno de ese país.
Prevost, que comenzó su labor religiosa como sacerdote, visitó la República Dominicana en 2005, específicamente la ciudad de La Vega. Durante su estancia en Santo Domingo, se destacó por su cercanía con la comunidad local.
En su formación académica, Robert Prevost estudió matemáticas, pero jamás descuidó su vocación religiosa, la cual siempre fue su verdadera pasión. Su sólida base intelectual y espiritual lo preparó para ascender en las filas de la Iglesia Católica.
Las conexiones del Papa León XIV con figuras destacadas del catolicismo nacional, especialmente en Perú, son cada vez más evidentes. De hecho, en Perú, ya ha comenzado a dejar su huella con sus predicas y mensajes espirituales, de acuerdo con Dina Boluarte, la actual presidenta de ese país.
Nacido en los Estados Unidos y adoptado por Perú, el Papa León XIV lleva consigo una mezcla de sangre española e italiana, lo que universaliza aún más su formación y perspectiva dentro de la Iglesia.
Aunque su estancia en Santo Domingo fue breve, su paso por la isla no pasó desapercibido, ya que también se movió en diversas direcciones, tanto a nivel pastoral como en sus relaciones con figuras clave del catolicismo dominicano.
A medida que el Papa León XIV inicie su pontificado, queda la interrogante: ¿podrán los líderes del catolicismo recibir su liderazgo y sus propuestas con la misma apertura y compromiso con la fe?
