CAMBITA, San Cristóbal, R.D.
El asedio terminó, tal y como te lo dije, la Policía lo mató para que nunca fuera a abrir la boca y delatara a sus protectores.
Así hizo saber un pariente, muy cercano de José Antonio Figuereo Bautista, conocido popularmente como «Kiko La Quema», tanto en su pueblo, Cambita Garabito, como en el bajo mundo de la delincuencia, especialmente el microtráfico de cocaína y marihuana, que era su negocio.
Era cierto, «Kiko La Quema» dirigía una peligrosa banda de distribuidores de drogas, y por si alguien se equivocaba y no cumplía con sus obligaciones monetarias o de entrega de estupefacientes, en su pandilla también había sicarios.
“Te lo dije, lo mataron… No podían agarrarlo vivo, porque si él hablaba, muchos policías, incluyendo coroneles, iban a tener problema”, con estas palabras, y sin ni siquiera saludar, informó un pariente de «Kiko La Quema», su muerte, la noche del viernes, en una balacera, en la zona conocida como Arroyo Higüero, de Cambita.
Dijo que eran alrededor 9:15 de la noche cuando «Kiko La Quema» fue sorprendido por un contingente de agentes policiales, que de inmediato comenzaron a disparar.
Estaba a bordo de un carro blanco, supuestamente con una menor de 15 años, que en la balacera, no resultó herida.
La Policía informó que el «Kiko La Quema», el hombre más buscado de República Dominicana, desde que el pasado mes de noviembre se decretó su “sentencia de muerte”, cayó en un “enfrentamiento” a tiros.
Horas después de que el presidente Luis Abinader lo exhortara a entregarse, algunos ciudadanos de Cambita, dijeron a RI que “Kiko La Quema” estaba sentenciado a muerte, asegurando que “a los policías no le convenía que lo agarren vivo por temor a que hable e identifiquen a sus protectores”.
Y así sucedió, el reinado de “Kiko La Quema”, quien tenía 48 años de edad y era definido como “un hombre peligroso”, llegó a su fin el viernes en la noche, al ser sorprendido, dentro de un carro, acompañado de una menor de 15 años.
Esa era su diversión, tener parejas menores de edad y disfrutar la vida, porque estaba consciente de que en cualquier momento, caería bajo el plomo de la Policía o de sus enemigos, en el peligroso mundo de las drogas.
Así lo resaltó su pariente, que esté digital no lo identifica para evitarle “complicaciones” con quienes, en algún momento, pudieron beneficiarse de los negocios sucios del hoy occiso José Antonio Figuereo Bautista.
Con la ejecución de «Kiko La Quema», el acoso llega a su fin en Cambita, donde anoche lloraron la muerte violenta de «Kiko La Quema», una especie de “padre Billini” en esa población.
«Kiko La Quema» era microtraficante, eso nadie lo pone en dudas, por el contrario, lo confirman con orgullo, pero lo que todo el mundo niega, rechaza, incluyendo viejos y jóvenes, era que fuera asaltante o ladrón.
“Los delincuentes tenían problemas con él (con Kiko La Quema), dijo “Miguelito”, tras señalar que la Policía mató “a nuestro papá”. Pero, no era hijo del fuera líder del microtráfico en Cambita y zonas aledañas.
Anoche, la Policía confirmó la muerte de «Kiko La Quema», y al mismo tiempo informó que su acompañante, la menor, está bajo custodia para los fines legales correspondientes.
De acuerdo con la Policía Nacional, «Kiko La Quema» murió en un “enfrentamiento” con agentes de la institución que “trataron de apresarlo” en el sector Loma de La Colonia, carretera El Cacao, Cambita Garabitos, San Cristóbal, en una zona montañosa.
Un pariente dijo que lo mataron en Arroyo Higüero, cerca de su casa, en Cambita.
La Policía informó que al momento del hecho se desplazaba en un carro Hyundai Sonata, blanco, placa A984780.
No se explica cómo, conduciendo ese vehículo, pudo enfrentarse a tiros con los agentes y la menor saliera ilesa.
La Policía dijo, igualmente, haberle ocupado un fusil sin marca y serie, y una pistola, marca Glock, calibre 9.mm, negra, serie No. BSWU634, con un cargador de 30 cápsulas, cuya foto se distribuyó a medios y redes.
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