Es increíble, Dinamarca con el apoyo de la UE, ahora se aventura de poner parte de sus escasos armamentos en poder de Ucrania, agregando que pueden ser utilizados para atacar a Rusia.
Y la pregunta es, ¿la primera ministra danesa Mette Frederiksen está en tratamientos en algún centro de psiquiatría?
Existe una leyenda similar que se atribuye al presidente dominicano, el ajusticiado dictador Rafael L. Trujillo, durante la Segunda Guerra Mundial.
Se refiere a que el tirano Trujillo declaró la guerra a Alemania, y al percatarse Adolf Hitler, se limitó a buscar un mapa mundial, ubicó a República Dominicana y clavó una aguja, asegurando que ya no había problema, estaba invadida, significando la poca importancia de la posición del régimen dominicano.
El poder de Dinamarca de disponer de ayuda militar para Ucrania, podría ser una salida con la cual la señora Frederiksen se pone al servicio de Washington, la gran sombrilla que arropa a la Unión Europea.
El envío de equipos con las más altas tecnologías a Ucrania, en nada cambiará la realidad en el teatro de las operaciones, y preguntamos, ¿superan los daneses a los envíos de Estados Unidos, Alemania, Gran Bretaña y otras fuerzas vehementes con la industria de la guerra?
Difícilmente la autorización de Dinamarca a Ucrania para que sus aviones de combate puedan penetrar y golpear objetivos dentro de Rusia, no pasará de ser una escalada más por la escabrosa ruta que conduce al fracaso.